Contents
- 1
- 2 Últimamente incluyo en mi rutina diaria la tarea de hacer la cama todas las mañanas.
- 3 Hay muchas grandes ideas detrás de este texto tan breve, quizás la más importante sea que las cosas pequeñas hacen las cosas más grandes.
- 4 Dar el primer paso haciendo una tarea, por pequeña que sea, te deja un pequeño sentimiento de satisfacción, te contagia un ritmo que te lleva a hacer otras tareas pequeñas y grandes.
Últimamente incluyo en mi rutina diaria la tarea de hacer la cama todas las mañanas.
Es una tarea que descuido desde mi época de universitario.
Grave error.
Lo que cambió mi perspectiva fue un discurso de motivación impartido por el Almirante William Mc Raven a estudiantes recién graduados que encontré en la página de Sebastian Marshall (!) Lo traduzco a continuación.
» Cada mañana dentro del entrenamiento básico SEAL, mis instructores, que en aquella época eran veteranos de Vietnam, se prensentaban en los barracones y la primera cosa que hacían era inspeccionar tu cama.
Si estaba correctamente hecha las esquinas formarían un ángulo de 90 grados, la manta y sábanas estarían perfectamente tensas, sin una arruga, la almohada justo en el centro, y a los pies de la cama, perfectamente doblada, la manta de repuesto.
Eso era una cama bien hecha para el ejército.
Era una tarea simple, mundana.
Pero cada mañana teníamos que hacer la cama a la perfección.
Al principio nos parecía ridículo, sobre todo porque nos estabamos entrenando supuestamente para ser guerreros de élite, NAVY SEALS endurecidos para la batalla.
Sin embargo he ido comprendiendo la sabiduría de esta acción tan sencilla a lo largo de los años.
Si haces tu cama cada mañana habrás completado la primera tarea del día.
Esto de da una pequeña sensación de orgullo y te anima a hacer la siguiente tarea y la siguiente después de esa.
Al final del día esa pequeña tarea completada se habrá transformado en muchas tareas completadas.
Hacer tu cama también refuerza el hecho de que las pequeñas cosas de la vida importan.
Si no puedes hacer bien las cosas pequeñas, nunca podrás hacer bien las cosas grandes.
Y si por desgracia tu día ha sido un cúmulo de desdichas, cuando llegues a casa tendrás tu cama hecha por tí, y una cama bien hecha te animará a dormir mejor y hacer las cosas mejor el día siguiente.
Si quieres cambiar el mundo, empieza por hacer tu cama.»
Hay muchas grandes ideas detrás de este texto tan breve, quizás la más importante sea que las cosas pequeñas hacen las cosas más grandes.
Cualquier tarea por compleja que sea se puede dividir en tareas más simples e ir haciendolas una a una.
Ayer hacía calor y no me apetecía salir a pasear a mis perros.
Lo que hice, sin pensar en el calor, fue ponerme los zapatos, luego les puse el collar, luego abrí la puerta… Una hora y media más tarde volvía a mi casa plenamente satisfecho de haber subido a un monte que me deja ver toda la costa de Málaga, Gibraltar y África.
Además mis perros y yo habiamos hecho un buen ejercicio aeróbico y todo empezó cuando me puse los zapatos.
Dar el primer paso haciendo una tarea, por pequeña que sea, te deja un pequeño sentimiento de satisfacción, te contagia un ritmo que te lleva a hacer otras tareas pequeñas y grandes.
Una tarea repetida durante el tiempo suficiente se convierte en un hábito y nuestra personalidad está moldeada por nuestros hábitos.
El crecimiento personal dependerá de los hábitos que elijamos.
Al final del día es bueno irse a la cama con la sensación de haber elegido buenos hábitos (comida sana, ejercicio, descanso) y no haber sucumbido a los malos (comida basura, sedentarismo,tabaquismo, abandono.)
Una persona que hace bien las cosas pequeñas a diario sin duda acabará haciendo bien las cosas grandes que se proponga. «Si no puedes hacer bien las cosas pequeñas, nunca podrás hacer bien las cosas grandes.» «Si quieres cambiar el mundo, empieza por hacer tu cama.»
¿Y tú? llegarás algún día a hacer tu cama como un NAVY SEAL??? como Forest Gump??? como el recluta Patoso??? Son años de duro trabajo, pero las recompensas vendrán con el tiempo.
¿Haces tu cama todos los días?
Cuéntame en los comentarios cómo empiezas tu día.
http:/https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=pxBQLFLei70
Gracias por leer y por compartir el post sólo si te ha gustado.
Ana says
Enhorabuena por tu blog!! Estoy preparando oposiciones de geografía e historia a secundaria y sigo el blog Prepára-T. Gracias a éste y por un enlace llegué al tuyo, que igualmente me parece fantástico. Los consejos que pones son tan efectivos y las situaciones tan reales que parecen hechos para mí! Y supongo que eso les pasará a todos tus lectores, consigues una personalización que hace que el blog sea muy estimulante. Gracias por compartirlo!!! Y te sigo desee hoy 😉
Javier says
Bueno… muchísimas gracias, Ana. Estos son los comentarios que me alegran el día y me dan ganas de escribir más. Con poder ayudar a alguno de vosotros a aligerar el tema del estudio o mejorar algún hábito me doy por satisfecho.
El blog de Ester es excelente, yo también lo sigo y me sirve para estar al día de muchos temas de mi profesión.
Si tienes tiempo te agradecería que compartieras el blog en tus redes sociales o entre compañeros tuyos que creas que les puede interesar.
Suerte con esas oposiciones. En uno de mis futuros posts quiero entrevistar a una amiga que fue el pasado verano presidenta de un tribunal de Geografía e Historia para que nos de su visión «desde dentro».
Gracias otra vez y un saludo!
Germán says
Javier, el enlace de Sebastian Marshall no lleva a nada. Saludos, Germán.
carrascouhu says
Germán, el enlace es éste 😉
http://sebastianmarshall.com/making-ones-bed
Javier says
Gracias por avisar, Germán. Ya está arreglado.
carrascouhu says
Genial el post, Javier. Yo lo primero que hago al despertar es hacer un café y ducharme. No para quitarme el sueño que tenga, sino por lo que dices en tu entrada: Una pequeña acción lleva a otra, y ésta a otra… Hacer el café, ducharme, vestirme, salir hacia la biblioteca y finalmente me veo estudiando oposiciones. Sin ese simple gesto de levantarme e ir a prepararme el café, ahora podría seguir dormido… 🙂
Una vez hecho eso, vislumbrar un futuro en el que expones tu unidad didáctica al tribunal disfrutando de ese momento, también ayuda a levantarte cada día 😀
Muchas gracias, Javier. Todo un descubrimiento tu blog.
Javier says
Tal y como yo lo veo los rituales mañaneros nos dan una energía y un impulso para afrontar el día de la manera correcta. Cualquier ejército da mucha importancia a mantener las rutinas ya que crean un estado de ánimo favorable para hacer cosas más importantes.
Lo que tú dices de vislumbrar el futuro es una visualización positiva y es una buena técnica para no dejarte vencer por el desaliento.
De nada, Carrasco. Espero verte por aquí a menudo. Invita a tus amigos a conocer el blog.
No te olvides de comentar aquí como te han ido las opos.
Te deseo buena suerte.
Eduardo Pérez says
Estoy plenamente de acuerdo con tu artículo. Hay magia en él, ya que describe uno de los grandes secretos para la realización de las personas.
Me gustaría dejarte un apunte personal: cuando hacer algo nos da un miedo profundo, debido a que nunca lo hemos hecho antes, a la responsabilidad que implica, o a mil cosas más, no hagas caso, aplica esta misma técnica de la subdivisión de algo grande en pequeños pasos. Llega un momento en que has avanzado tanto en el camino, que el salto final (y que más nos asusta) es más fácil de dar.
Un abrazo, Javier. ¡Sigue adelante con tus pequeñas cosas!.
Eduardo
Javier says
Gracias, Eduardo! Se trata de un secreto a voces que todo el mundo intuye pero que en la época tan «ruidosa» que nos ha tocado vivir pocos oyen de verdad.
Esa técnica que tu dices es la misma que empleo yo cada vez que me tengo que subir a un avión XD
Y sobre todo una máxima por la que yo me rijo «no se puede vivir con miedo».
Un abrazo! Interesante blog tienes ahí sobre todo para los que tenemos «cuatro ojos»! Invito a los lectores a que lo visiten haciendo click en tu nombre.