Es posible que hayas pasado el examen escrito de tus oposiciones ( Si es así enhorabuena y si no repasa las lecciones aprendidas y vuelvelo a intentar).
Si has pasado el escrito ahora te toca enfrentarte al examen oral.
Es importante entrar con un estado de mente adecuado que se transfiera a tu actuación ante el tribunal.
No tienes que parecer tímido y apocado sino resuelto y controlando la situación.
Para controlar la situación y que la situación no te controle a ti, ya lo he dicho muchas veces, lo mejor es ensayar tu presentación hasta que te salga de manera automática.
Es importante trasmitir que sabes de lo que estás hablando y hacerlo sin un ápice de arrogancia, sin parecer prepotente.
Para conseguir esto es importante que hayas cultivado una visión muy clara de tu gran objetivo.
Cuando a Arnold le preguntaron cómo consiguió entrar en su primera competición a Mr. Olympia con un aplomo y una seguridad tan grandes, esto es lo que respondió:
My confidence came from my vision. Iam a big believer that if you have a very clear vision of where you want to go, then the rest of it is much easier.
Because you always know why you are training 5 hours a day, you always know why you are pusing and going through the pain barrier, and why you have to eat more, and why you have to struggle more, and why you have to be more disciplined…
I felt that I could win it, and that was what I was there for: I wasn´t there to compete. I was there to win.
My seguridad fue fruto de mi vision.
Siempre he creído que si tienes una visión muy clara de hacia donde quieres ir el resto es mucho más fácil.
Porque siempre tienes en mente por qué estás entrenando 5 horas al día, siempre sabes por qué te fuerzas a ti mismo a ir más allá de la barrera del dolor, y por qué tienes que comer más, y por qué tienes que luchar más y ser más disciplinado que los demás…
Estaba convencido de que podía ganar el título de Mr. Olympia y para eso estaba allí. No había ido a competir. Había ido para ganar.
Como dicen los anglosajones: «Keep your eyes on the price». Tener un propósito muy claro te va a dar energía para los momentos en los que flaquees y va a tirar de ti cuando empieces a preguntarte: «¿pero por qué me metí en este fregado?» «¿por qué me tengo que quedar estudiando cuando todos mis amigos están fuera?
El tener una visión clara de a dónde quieres llegar es algo que comparten muchos deportistas de élite. Si llevas tiempo leyendo mi blog te habrás dado cuenta de que muchas veces comparo opositar con una competición olímpica. Y no es un paralelismo casual: esto es una carrera de fondo a la que suelen llegar los mejores (hay que tener en cuenta el factor suerte también) pero es, al fin y al cabo, un maratón en el que resiste gana.
Cuando entres al examen oral tienes que estar convencido de que vas a ganar. Esa seguridad te la va a dar tu preparación pero también la claridad con la que hayas visualizado tu gran objetivo durante los meses previos.
Acuérdate de Schwarzenegger y que tu examen oral sea digno del mismísimo Terminator 🙂
Deja una respuesta